Unas sencillas pistas para descansar rezando con la invitación que nos hizo la Hna María Elena en su carta, mientras aguardamos la Pascua que ya está cerca


Queridos encargados de pastoral, docentes, catequistas, asistentes, asesores y animadores de exploradores, oratorios, proyecto vida, grupos misioneros, juveniles:

             Al iniciar el año, con toda la animación pastoral que requiere de parte de cada uno de ustedes, no quiero dejar pasar este momento importante para augurales un fecundo año, pleno de la misericordia de Dios en la vida de cada uno.
            Hace más de un año las hermanas tuvimos un Capítulo General y afirmamos lo siguiente:
            “Compartimos el sueño de ser comunidades abiertas y acogedoras: espacios de Evangelio en los que Jesús es el centro; donde, con los jóvenes, podemos vivir el espíritu de familia típico de Valdocco y Mornese en el respeto a cada persona y en la corresponsabilidad; espacios que preparen para una inserción activa en la sociedad” (Actas Cap. Gral. XXIII Nº 58. La letra negrita es mía).
            Siento que ustedes especialmente son quienes más en contacto están con los chicos que forman parte de nuestras casas, aquellos que en el día a día cruzan nuestros patios, nuestras aulas. Por esto siento la necesidad de escribirles.
            Quiero desearles a cada uno que Jesús sea el centro de sus propias vidas, que con Él hablen de sus cosas y de las de los chicos que animan.
            Y les pido por favor que toda chica/o que pase por cada casa de María Auxiliadora conozca a Jesús, que aprenda a hablar con Él y a confiarle sus cosas. Que sepan que tienen en María una mamá llena de ternura.
            Esto es lo más  importante: que aprendan a conocer a Jesús y a María. Sin dudas Jesús es el centro de nuestras comunidades. Y es fundamental que todos pensemos como Jesús, hablemos como Él, y de Él y obremos como Él.
            Les pido que propongan y enseñen a los chicos a rezar, como lo hicieron Don Bosco y María Mazzarello, visitando a Jesús en la Capilla, a adorar a Jesús, a encontrarlo en la Palabra, en la Reconciliación y en la Eucaristía. Y también a encontrarlo en quien tengo al lado. Sólo así podrán ser buenos ciudadanos, cristianos y salesianos.
            Gracias por animar la vida de nuestras comunidades; le pido a Dios que en esta Pascua podamos todos abrazar a Jesús Crucificado y Resucitado y a no soltarnos de Él.
            Los saludo con cariño y corazón agradecido.
                        En Jesús y María

                                                                                                Hna. María Elena Fernández


 --------------------------------------------------------------------

Queridos amigos y amigas:
La carta que envió la Hna María Elena con motivo del inicio de este año, me dio la idea de invitarlos a rezar en estos días de Semana Santa ese pedido que nos hace, ese “envío” al que nos lanza a vivir:


Que toda chica/o que pase por cada casa de María Auxiliadora conozca a Jesús... aprenda a hablar con Él y a confiarle sus cosas... Que todos pensemos como Jesús, hablemos como Él y de Él, y obremos como Él.


Tal vez la lectura del evangelio de alguna de las celebraciones de esta Semana nos regale hacer un alto, a tomarnos un tiempo para hacer silencio y experimentar nosotros mismos ese encuentro con Jesús al que hemos estado motivando a los chicos durante estos días.


Cuando llegaron, envió a dos de sus discípulos diciéndoles: vayan... y encontrarán un asno atado que nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo... El Señor lo necesita (Lc 19,28-40)


Algunas pistas para rezar con esta Palabra:
ü  “Envió a sus dicípulos diciéndoles”... ¿Qué Palabra de Jesús está resonando más fuertemente en mí durante este tiempo? ¿Hacia dónde me está enviando?
ü  “Desátenlo”... Nombro y rezo aquellas ataduras que me inmovilizan, aquellas cargas que todavía no me atrevo a reconocer. Yo también quiero vivir la Pascua con Jesús.

ü  “El Señor lo necesita”... Me pongo en las manos de Jesús. Él me ama así como soy. Él sólo espera la puerta abierta de mi confianza y amor.